De enero a septiembre la producción mexicana de carne de res mostró una tendencia a la baja, cayendo 4.2% en términos interanuales, con lo que quedó en 1.5 millones de toneladas, de acuerdo con el Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA).
El mismo comportamiento se reflejó en un consumo aparente que resultó 1.6% inferior en comparación con los primeros nueve meses del año pasado, ubicando la demanda nacional en poco más de 1.4 mt.
Si bien el nivel de ingesta disminuyó, las importaciones de dicha proteína animal totalizaron en 143,000 t., luego de un aumento de 17.2%, mientras que en el caso del valor fue de 28.7% acumulando 1,086 millones de dólares.
Aún con este escenario, México continúa en el camino de la autosuficiencia en este sector
Pese a esta situación, en el GCMA aclararon que México continúa siendo autosuficiente en cárnicos bovinos, con un índice por encima de 108%, aunque se espera que para el cierre de 2023, se reduzca a 105%.
En cuanto a las exportaciones mexicanas, hasta septiembre ascendieron a 234,000 t., 11.1% menores, y en el conjunto de este año bajaría 10%, posicionando en el extranjero 301,300 t.
Las perspectivas del organismo consultor para la producción de 2023 apuntaron que esta sería 1.9% superior a la de 2022, con 2.2 millones de toneladas, sin embargo, las importaciones subirán 14%, cifrando 192,800 t.
Fuente: Ganaderia.com